Colombia sigue conmocionada por el terrible asesinato de Sofía Delgado, una niña que fue encontrada enterrada en un cañaduzal a 10 kilómetros de Villa Gorgona, cerca de Candelaria, Valle del Cauca.
Brayan Campo fue detenido como el principal responsable del crimen, y su posterior confesión reveló perturbadores detalles, muchos de los cuales fueron compartidos por su entonces pareja, Evelyn Rodas.
Rodas relató que, tras el abuso y asesinato de la niña, Campo continuó su vida de manera normal, sin mostrar signos de nerviosismo. Según ella, él mantenía la calma y realizaba sus actividades diarias como si nada hubiera ocurrido. Incluso mencionó que Campo comía tranquilamente y no se alteraba ante la preocupación general por la desaparición de la menor.
“Siempre decía que si pagaba por una injusticia, pagaría por otra también. Nunca me mostró nervios, y ese día comió como de costumbre. En las noches veíamos películas, y toda la semana actuó con total normalidad”, contó Rodas.
La frialdad con la que Campo actuó después del asesinato le permitió seguir trabajando como si nada, pero dejó pistas que levantaron sospechas entre las autoridades. Además, el testimonio de la madre de otra niña, que casi fue secuestrada, fue clave para desvelar la verdad.
Rodas afirmó que, debido al comportamiento de Campo, nunca sospechó que él fuera capaz de cometer un crimen tan atroz en la veterinaria que utilizaba como fachada. “Nunca pensé que pudiera hacer algo así, pero esta vez ya no me miraba a los ojos, solo miraba al suelo. Le pregunté: ‘Brayan, ¿vos tenés algo que ver con lo de la niña?’”.